Cumplir con las necesidades de protección

Aún no se conocen como van a ser las medidas del desconfinamiento, pero se intuye que la distancia social de seguridad va a ser un requisito indispensable. Guardar la distancia de un metro o dos metros entre los trabajadores, será necesario si queremos que las empresas empiecen a trabajar con normalidad.

Las mamparas ayudan a separar espacios, y puestos de trabajo cuando los trabajadores comparten mesa. Las diferentes medidas y opciones de nuestras mamparas de protección, permiten que se adapten a todo tipo de situaciones.

En los establecimientos comerciales los propietarios deben dar imagen de confianza a los clientes, al mismo tiempo que protegen a sus empleados, por lo que necesitan medidas que eviten o reduzcan las posibilidades de contagio.

Nuestras mamparas de mostrador o las mamparas suspendidas evitan los contagios de los empleados y dan a los clientes la seguridad de que ellos tampoco pueden ser contagiados.

Los dispensadores serán necesarios en establecimientos donde podemos tocar los productos con las manos: supermercados, tiendas de ropa, perfumerías...