¿Qué podemos hacer para que nuestra oficina sea eficiente?

¿Qué podemos hacer para que nuestra oficina sea eficiente?

Llevamos unos años en España en los que se habla mucho de la importancia del ahorro energético y de que tenemos como ciudadanos la responsabilidad de modificar nuestros hábitos de vida de manera que puedan afectar a reducir consumo energético. Los impulsores de esta campaña no andaban equivocados cuando en el 2008 se iniciaron numerosas acciones que iban en esta dirección. El motivo es sencillo, cuanto más ahorro energético hagamos, menor será el coste y tendremos un mejor aire, lo que contribuirá a mejorar nuestra salud y nuestro rendimiento laboral, entre otros motivos. En definitiva, un discurso que nos llevó a saber que precisamente es en la gran masa de edificios, viviendas y oficinas, en los que se produce el mayor consumo de energía de nuestro país. En este sentido, se han realizado muchos estudios en materia de lo que podemos hacer para mejorar esa eficiencia energética y convertir nuestro lugar de trabajo en una oficina verde.

¿Qué podemos hacer para mejorar nuestro entorno de trabajo?

Hay muchas cosas que podemos hacer como empleados o directivos de una empresa, cuya actividad laboral se desarrolla a diario en una oficina para que ésta se la considere eficiente. En cualquier caso os trasladamos algunas ideas que os pueden ayudar:

• Recuerdo esas oficinas en las que los ordenadores y, en definitiva, todos los equipos se quedaban encendidos toda la noche, algo que debemos evitar. Apagándolos, es posible conseguir una reducción del gasto eléctrico de un 10%, aproximadamente. 

• El gasto eléctrico por causa de la luz puede llegar a suponer el 70% de la factura eléctrica de una oficina, por lo que encender las luces sólo cuando realmente es necesario será un buen remedio para reducir el gasto, así como utilizar bombillas de consumo reducido. Sin embargo, sería conveniente incorporar costumbres como apagar las luces de la oficina por la noche, una mala costumbre que puede apreciarse en los centros de negocios de cualquier ciudad española.

• Comprar electrodomésticos eficientes de Clase A: Es habitual que en las oficinas se destine una pequeña, en ocasiones no tanto, zona para que los empleados puedan comer o prepararse un café. Estas zonas, conocidas popularmente con el nombre de "office", suelen tener algunos electrodomésticos como frigoríficos o microondas. Cuando este sea el caso, será determinante para el ahorro eléctrico la compra de aquellos en cuyas etiquetas especifiquen que son de Clase A, porque son los que menos consumen y conseguir un 75% de ahorro eléctrico con su instalación y uso.

• El uso extendido de los portátiles: El uso en las oficinas no está mu extendido, pero muchos expertos han indicado que con el uso de portátiles se puede conseguir otro 10% menos de consumo eléctrico en comparación a las tradicionales torres.

Obvia decir que la costumbre de utilizar o activar el modo de ahorro de energía en los ordenadores y todos aquellos aparatos que lo permitan también sumará a una política de ahorro en la que donde la conciencia medio ambiental no alcance, sí lo hará el interés económico de la empresa.

La arquitectura verde

No es el objetivo de este artículo analizar la importancia de las nuevas corrientes arquitectónicas en la construcción de obra civil como pueden ser los edificios de oficinas, pero merece la pena mencionar que la industria de la construcción se ha puesto en marcha y es capaz hoy en día de diseñar edificios cuya concepción desde un buen principio van dirigidas a la eficiencia energética. Por ejemplo, los aspectos que se pueden llegar a valorar pueden ser desde la elección del terreno por la orientación del mismo buscando que la luz solar esté presente el mayor tiempo posible, la presencia de plantas y vegetales con el objetivo de renovar el aire y una larga lista que detallaremos en próximas publicaciones que van desde el uso de nuevos materiales, pasando por cambios sustanciales en los diseños y acabando en la instalación de mobiliario especial, así que la implantación de nuevos hábitos de trabajo como los que se han narrado en párrafos anteriores.