¿Cuándo conviene reformar un local comercial?
No cabe duda de que el mercado está cambiando. Los consumidores son cada vez más sofisticados y demandan experiencias de compra diferentes. Ante este panorama, no es de extrañar que vayan surgiendo nuevas tendencias en la manera de ver los puntos de venta. Cada vez son más las empresas que buscan enriquecer la compra en su establecimiento a través de lo que se conoce como "Marketing de Experiencias". Es así como en los últimos años hemos visto surgir locales que cuentan con escenografías propias de una auténtica obra de teatro, juegos de luces, equipos musicales de calidad, e incluso DJs tocando en directo.
Las grandes marcas como Apple o Sony cambian constantemente el diseño de sus locales para ofrecer nuevas experiencias a sus clientes donde es posible probar, tocar, jugar, descubrir... algo que apenas podíamos llegar a imaginar hace tan sólo dos décadas. Y si ellas lo hacen, por algo será.
¿Es hora de replantearse la configuración del punto de venta?
El factor protagonista de cualquier punto de venta debe ser siempre la funcionalidad. Desde el primer momento en que el cliente entra por la puerta nuestra imagen de marca debe quedar plasmada en la arquitectura del espacio, pero lo más importante es comprender el flujo cotidiano del trabajo y encontrar la mejor forma de acompañarlo a través del diseño. Si un local es precioso desde el punto de vista estético, pero no resulta funcional, no está sirviendo para los objetivos comerciales de la empresa. En estos casos, si no contamos con el local que se adecue a ello, reformar un local comercial es siempre la mejor solución para ampliar espacios o modificar aspectos que no fluyen desde el punto de vista funcional.
No obstante, si lo que buscamos es cambiar la imagen o atraer nuevos clientes, lo más aconsejable enfocar nuestros esfuerzos en la identidad visual, el mobiliario, la comunicación, la decoración, etc. Es decir, el diseño del local comercial.
Por eso, todo depende del tipo de marca y del establecimiento del que estemos hablando. Por ejemplo no es lo mismo un restaurante que una entidad bancaria. Cada uno de ellos cuenta con unas necesidades específicas en cuanto a instalaciones, seguridad, decoración, etc. Y evidentemente unos cuentan con más libertad de diseño que otros. Por supuesto, las franquicias son un mundo aparte, ya que cuentan con un manual de marca e identidad visual más concreto establecido previamente y que debe ser respetado.
Entonces, ¿es necesario cambiar el diseño y la decoración del local cada cierto tiempo?
Lo cierto es que no existe un momento concreto para reformar un local comercial o cambiar la decoración. Pero en el contexto en el que nos movemos actualmente, es importante redecorar, innovar, sorprender, enamorar y conquistar a los clientes. Con lo cual es aconsejable volver a pensar en el espacio que tenemos para poder mejorar la experiencia de compra cada año. Muchas veces es suficiente con cambiar la decoración o distribuir los productos de otra forma, lo que resulta mucho más económico que una reforma integral.
No obstante, si queremos agrandar o dividir alguna zona o mejorar el punto de venta desde el punto de vista arquitectónico, es evidente que que deberemos llevar a cabo un proyecto de reforma. Lo cual debe ser visto como una inversión, que a la larga hará aumentar las ventas de nuestro negocio, y no como un gasto.
Para terminar, es importante que los profesionales que lleven a cabo tanto las tareas de reformar un local comercial como de diseñar el espacio o cambiar la decoración sean verdaderos expertos en lo que hacen y que estén comprometidos con tus necesidades y con tus expectativas, ofreciéndote asesoramiento en todo momento. Y es que cuando se trata de arquitectura publicitaria, un buen proyecto es aquel que ayuda al cliente a cumplir sus objetivos comerciales. Por eso, si estás pensando en reformar un local comercial o en darle un lavado de cara a la decoración de tu negocio, no dudes en ponerte en contacto con Espacios de Oficina para que hagamos realidad el proyecto que tienes en mente.