¿Sabías que cuando los empleados tienen la libertad de decidir el diseño de su espacio de trabajo su productividad aumenta en un 30% más que en una oficina minimalista y hasta un 15% más que en una oficina decorada? Son las conclusiones que se extraen de un estudio llevado a cabo en el año 2010 por la consultora Identity Realization.
Hasta entonces, los expertos pensaban que las enfermedades que experimentaban sus empleados, como la ansiedad, el estrés, la hipertensión y la depresión, tenían que ver con una mala gestión empresarial. Craig Knight y Alex Haslam centraron su estudio en encontrar el modo de que los trabajadores fueran más felices y productivos para reducir la frecuencia de las enfermedades que acabamos de mencionar.
Los resultados arrojaron conclusiones bastante interesantes. La mayor parte de los participantes en la investigación encontraron que los diseños demasiado minimalistas resultaban algo opresivos, aquellos suavizados con plantas y fotos de flores crearon una experiencia más positiva, logrando que fueran más productivos y eficientes. Por su parte, aquellos diseños en los que los participantes tenían la libertad de realizar cambios fueron los que mayor satisfacción laboral produjeron y lograron mayor productividad.
Cuando los empleados podían diseñar su propio espacio, se sintieron mejor y, en consecuencia, trabajaron más y mejor, aumentando su productividad hasta en un 30%. En cambio, cuando el diseño era estático, los trabajadores reaccionaban con un sentimiento de odio y su grado de eficiencia se reducía.
Esta información resulta muy valiosa a la hora de captar nuevos talentos, algo que ha cobrado un gran peso en los últimos años dentro de las empresas. Esto ha hecho que se analicen los distintos elementos de las oficinas, como la temperatura, los colores, la iluminación y los escritorios.
Consejos de diseño del espacio de la oficina para mejorar la productividad
Colores
Los colores que mejor funcionan para mejorar la productividad son el verde y el azul, precisamente aquellos que más encontramos en la naturaleza. El azul es un color relajante que favorece la concentración, mientras que el verde es ideal para aquellas oficinas en las que se trabaja muchas horas, ya que crea calma y mejora la eficiencia. En cambio, los peores son el gris, el blanco, el naranja, el morado y el beige, ya que inducen a la tristeza y a la depresión. Es importante tenerlo en cuenta, ya que esto influye en la productividad, en el estado de ánimo y en los niveles de energía de los empleados.
Plantas y ventanas
Según un estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Texas, una oficina decorada con plantas y que posee suficientes ventanas favorece el bienestar de los trabajadores.
Temperatura
Una investigación realizada por la Universidad de Cornell demostró que una temperatura de unos 25 grados aumenta la productividad en un 150% y reduce la cantidad de errores que se cometen. Esto ahorra a las empresas unos 2 euros por trabajador y por hora.
El concepto de open office no es algo del siglo XXI, sino que apareció a principios del siglo XX de la mano del arquitecto Frank Lloyd Wright, que consideraba que este tipo de diseño podía ayudar a romper con las barreras sociales que las dividían. Consideraba que de esta forma se aumentaba la productividad y se fomentaba la cultura de compartir. En la actualidad, el 70% de los empleados en Estados Unidos trabajan en espacios abiertos, favorecido en gran medida por el ahorro de costes.
Sin embargo, debes saber que las constantes interrupciones a las que están expuestos los empleados en este modelo de oficina y el hecho de no poder ajustar bien la temperatura para adaptarse a todos afectan negativamente a la productividad.
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