Las mamparas de oficina son una de las soluciones decorativas más interesantes cuando necesitamos dividir espacios. Pero tanto si vas a montar una nueva empresa como si estás pensando en hacer una reforma integral, es importante que hagas la elección con detenimiento, ya que esta decisión puede ser determinante.
Lo primero que debes pensar es que el tiempo va pasando y las tendencias decorativas también. Con lo cual esa mampara que se ve ideal ahora, mañana puede quedar obsoleta y dar un aspecto de tu empresa algo anticuado. Pero además, los propios sistemas y filosofías de trabajo cambian constantemente. Por este motivo, si ya tienes muy claro que vas a reformar tu oficina, es fundamental que pienses con vistas al futuro, pues se trata de una inversión muy importante y, como es natural, querrás que tenga una vida útil lo más amplia posible.
En cualquier caso, es evidente que los valores de tu empresa y el sistema de trabajo de la misma serán factores decisivos a la hora de configurar el espacio de la oficina. A través de esta análisis previos que solamente puedes hacer tú, las mamparas de oficina y los muebles que vayas a poner en cada estancia serán los encargados de ayudarte a lograr tus expectativas, convirtiéndose en la carta de presentación de la compañía. Como es obvio, no todas las mamparas divisorias son iguales y no todas serán adecuadas para cubrir todas tus necesidades, por lo que merece la pena que dediques un tiempo a pensar en la forma de trabajo diaria de tu actividad y, de esta forma, poder elegir aquellas que mejor se adapten a tu trabajo.
Lo primero que debes hacer es decidir si quieres un espacio diáfanos en el que todos los empleados trabajen juntos dentro de una misma estancia para que se relacionen con facilidad, si quieres puestos de trabajo compartimentados o si incluso quieres crear un despacho individual para cada trabajador. La decisión quedará condicionada por la filosofía de trabajo de tu empresa.
Pero además de la zona específica para los trabajadores, siempre hay zonas en una empresa que deben estar compartimentadas como es el caso por ejemplo de la sala de reuniones, los despachos de los directivos, las zonas de descanso, la recepción... Analiza el espacio del que dispones para poder adaptar el mobiliario a la superficie destinada a ellos.
Hay momentos en la vida diaria de una empresa en los que se necesita cierta privacidad tanto para la propia plantilla como a la hora de recibir a clientes o proveedores. Por eso, debemos pensar que las mamparas de oficina no solamente deben servir para crear diferentes estancias para estos fines, sino que además deben ser capaces de aislarlas del ruido y de las miradas ajenas.
Las mamparas de oficina aportan una gran flexibilidad al espacio, ya que algunos modelos pueden adaptarse. Pero además se instalan sin necesidad de meternos en engorrosas obras y pueden realizarse cambios cuando queramos. Sin olvidar que pueden darnos luz a través de las ventanas y al mismo tiempo cerrarse con una persiana cuando queramos ganar privacidad.
Tu presupuesto no tiene por qué ser un obstáculo. Estudia con detenimiento qué es lo que necesitas y analiza las posibles soluciones que te permitan optimizar tu inversión. Además, no hace falta que hagas una reforma de la oficina completa ahora, sino que puedes ir realizando el proyecto por fases e ir añadiendo nuevas estancias con mamparas de oficina a medida que las necesidades vayan surgiendo. De esta forma, las instalaciones de tu empresa irán creciendo de manera paralela al crecimiento de la comprañía.
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